miércoles, 25 de febrero de 2015

Mini napolitanas veganas: 5 tipos

Se viene una fiesta, una despedida, un cumpleaños... Y tú no sabes qué llevar. ¿Compras unas patatas? ¿Unos crusanitos salados? ¿Unas napolitanas?

Mi pregunta es: ¿por qué comprar algo cuando puedes hacer estas preciosidades y ser el rey de la fiesta?


¡Y nadie se dará cuenta de que son 100% vegetales si no lo decís!

Veamos, ¿qué tipos de napolitanas os traigo hoy?
De olivada, de crema de tomate y almendras, de mermelada con fresas frescas, de chocolate y de crema casera... ¿No se os hace la boca agua solo pensar en su sabor? ¡Pues no esperéis más y hacedlas vosotros mismos!

INDREGEDIENTES:
(divididos en tipo de napolitana)


Para 25 mini napolitanas:
1 masa de hojaldre
1 cda leche de soja
Semillas de sésamo (ajonjolí)

Mini Napolitanas de ''sobrasada vegetal'':
10 tomates secos
½ vaso almendras
1 cdita pimentón rojo
1 cdita orégano seco
3 cdas aceite de oliva

Mini Napolitanas olivada:
½ vaso olivas negras
10 olivas kalamata
1 cda aceite de oliva

Mini Napolitanas chocolate negro:
10 cuadrados de chocolate

Mini Napolitanas mermelada:
1 cda mermelada de fresa
1 fresa fresca

Mini Napolitanas crema:
1 vaso de leche
1 cda azúcar moreno (o blanco)
1 cdita canela
1 cda margarina
Ralladura de ½ limón
3 gotitas esencia de vainilla

PASOS
¡LO PRIMERO DE TODO! Colocar los tomates secos en agua. Necesitan mínimo 1h de remojo, pero es ideal dejarlos 3-4h. Así que podéis colocarlos antes de empezar a hacer las napolitanas.


Empezaremos por la crema, ya que debe reposar un tiempo antes de hornearse para que pueda cuajar bien. Lo primero que debemos hacer es poner la leche a fuego medio-bajo y esperar a que empiece a sacar vapor. Mientras, rallamos el limón. 

Una vez la leche se esté vaporizando, echamos el limón, la canela, el azúcar y la vainilla y mezclamos.


Debemos estar removiendo la crema constantemente para que no se nos pegue. Es muy importante, al menos removerla cada minuto. Por eso mismo hemos empezado por ella, es el relleno más trabajoso. Una vez tenga la consistencia de un yogur apartamos del fuego pero la dejamos en el mismo cazo. Tranquilos, a partir de este momento ya no se quemará.


Momento de pasar a la olivada, relleno sencillísimo. Debemos colocar en un recipiente (vamos a usar la thermomix o batidora de mano, así que mejor si el vaso es alargada y resistente) todas las olivas y el aceite de oliva.


Y lo único que debemos hacer es batir a potencia media hasta que nos quede una pasta así:


Los dos rellenos que vienen ahora son facílisimos y de mis favoritos, ¿qué puede haber mejor? Lo primero será cortar una fresa en trocitos muy muy muy pequeños, de medio centímetro máximo. Una vez tengamos los trocitos (¡veréis cuántos salen de solo una fresa!) los mezclamos con la mermelada y dejamos reposar.


Para hacer el chocolate (¡sé que muchos de vosotros morís por probar estas napolitanas!) simplemente debemos colocar los trocitos de chocolate en una taza y calentar en el microondas. ¡OJO! El chocolate es muy delicado, así que debemos deshacerlo de una forma muy concreta: siempre a temperatura media y no más de 30 segundos. Cada 30 segundos, sacamos la taza del microondas y lo movemos todo bien. Volvemos a colocarlo 30 segundos y volvemos a mover. Así hasta que esté todo deshecho y delicioso. 

IMPORTANTE: el chocolate debemos deshacerlo cuando ya estemos llegando al final de nuestro trabajo, sino se volverá a endurecer y habremos perdido tiempo. Reservarlo para el final o casi el final.


Y por último vamos a hacer lo que se llama ''sobrasada vegetal'' pero no tiene sabor de sobrasada, así que no os quiero engañar. Tiene textura de ello, eso sí. Es una crema de tomates secos y almendra, así que sabrá a eso. ¡Está riquísimo! Sobretodo para aquellos que sean fans del tomate.

Colocamos en una procesadora de comida (puede servir la batidora de mano, pero la procesadora es mucho más potente para hacer puré las almendras) los tomates anteriormente mojados SIN el agua, las almendras, el aceite y todas las especias. Y batimos.


Recordad ir abriendo la procesadora para quitar lo que se quede en los lados y que todo se procese uniformemente. Como expliqué en la receta del helado de plátano. Finalmente, os debería quedar una pasta así:


¡Ya hemos hecho todos los rellenos! Tranquilos, llegado este momento solo queda la fácil. Cogemos la lámina de hojaldre y la extendemos JUNTO su papel de hornear. Para hacerlo todo más fácil, podéis colocar el papel y el hojaldre directamente en la bandeja del horno. 

Cortamos el hojaldre en tres partes verticales iguales. Así:


Y después, como nosotros tenemos 5 rellenos, hacemos una línea horizontal por medio de las otras líneas, para tener 6 espacios. Yo en el sexto espacio coloqué un relleno de fajitas vegetal RIQUÍSIMO, que si lo queréis podéis decírmelo en los comentarios y haré la receta.

Como véis en la foto, colocamos en el centro de cada trozo de hojaldre el relleno de forma vertical. Así:


Y lo único que debemos hacer es doblar cada lado de hojaldre al centro (colocándolo por encima del relleno) y sellándolo con los dedos. ¡IMPORTANTE SELLARLO BIEN! Una vez tengáis todo el hojaldre cerrado y sellado, lo pintáis con leche de soja por encima (ligeramente, simplemente para dorar) y le añadís las semillas de sésamo. Os debería quedar una cosa así:


Y ahora lo único que debéis hacer es hornear estas preciosidades durante 15-20 minutos, dependiendo de vuestro horno, a 180ºC. Deben quedar doraditas y crujientes.

Y este es el resultado:


¿No morís por probarlas? ¡Estaban deliciosas todas! Os animo a hacer la receta y sorprender a todo el mundo. 

¡Un besito y gracias por pasar!

miércoles, 18 de febrero de 2015

Arroz con judías y pimiento rojo | RECETAS CON MAMÁ


¡Nueva sección en el blog! Y no es nada más interesante que las recetas de toda la vida de mi madre... ¡veganizadas! Todo hecho con su ayuda y sus consejos. ¿Qué hay mejor que una madre para la buena cocina? ¿Os lo perderéis?

Y mirad qué plato traigo hoy...

¿Este plato no os chilla ''plato casero''? Y, aventurándome un poco más, ¿no os parece delicioso? Espero que no estéis leyendo esta entrada con hambre, ¡porque no podréis esperar tanto rato a prepararlo! 

La receta que os traigo hoy es deliciosa, rica, casera, calentita, nutritiva... Pero lenta. No le quitaréis la hora de trabajo, sino más. Una receta original de mi madre, y sin duda una de mis favoritas. ¿No os animáis a probarla?


INGREDIENTES 
(para 2 raciones)
1 bol judías blancas
½ cebolla
2 tomates
1 tacita de aceite de oliva o girasol
3 pimientos
1 bol arroz
½ litro caldo vegetal
1 cdita colorante alimenticio

PASOS
¡Todo está cocinado a fuego medio! En ningún momento se sube ni se baja la temperatura: ¡muy importante!
Lo primero que debemos hacer es lavar y cortar los pimientos rojos en trocitos medianos y rehogarlos en la sartén con la tacita de aceite. Los estaremos salteando durante unos minutitos hasta que se ablanden ligeramente pero no queden tostados.



















Una vez el pimiento esté rehagodo, rallamos la cebolla (¡un muy buen truco! rallar la cebolla hará que quede el dulce sabor pero sin trocitos) y la doramos.


A continuación, rallamos los dos tomates y los salteamos igual que con la cebolla, hasta que todo tenga este color:



















Este es el momento de añadir el bol de arroz. Lo añadimos en seco y lo mezclamos todo.



















Sin tardar mucho, añadimos el doble de caldo vegetal, lo que en esta receta sería medio litro.



















Dejamos cocer el arroz con las verduras durante 10 minutos y, seguidamente, añadimos las judías. 



















Y lo único que debemos hacer ahora es esperar... y esperar... y esperar... ¡El olor que saldrá de vuestra cocina hará que no queráis esperar! Pero creedme, merece la pena.



















Cuando hayan pasado otros 7-10 minutos, depende de como os guste el arroz, debemos sacar la sartén del fuego y dejar reposar el arroz unos 5 minutos. ¡Lo sé! La espera es horrible.



















¡Y listo! Ya tenéis vuestro arroz con judías y pimientos rojos... ¡Delicioso!



















Si por casualidad lo hacéis, recordad que podéis encontrarme en Facebook y Twitter :D ¡Me encantaría ver las fotos de vuestras creaciones!

¡Un besito enorme!

miércoles, 11 de febrero de 2015

Helado de plátano sencillo | RECETAS SANAS

¿Qué se puede conseguir con un par de plátanos y una procesadora/batidora?


SÍ. HELADO.

¡Hola pandas! Hoy os traigo una receta que sé que os va a APASIONAR. Para los amantes del helado (bueno, para qué mentir, para todo el mundo... ¿quién no ama el helado?), este truco va a salvar vuestra salud, dieta, línea... Todo. 

Un helado de 200 calorías por BOL (no bola no, por un bol entero), que no llega ni al gramo de grasa, sanísimo, sin productos animales, rápido de hacer... ¿Qué más se puede pedir? Simplemente es magia.

Yo tampoco me lo creía al principio, era reacia a probarlo. No seáis como yo, porque os perderéis algo maravilloso. ¡Vamos con la receta!


INGREDIENTES
2 plátanos pequeños/medianos maduros
½ vaso de leche de soja (opcional, se puede usar agua).

PASOS
Lo primero de todo es cortar el plátano y congelarlo. Los trocitos recomiendo hacerlos pequeños para quitarle trabajo a la batidora, y se pueden guardar en un tupper, una bolsa... Donde queráis (bueno, no los echéis directamente al congelador...). En unas 4-8 horas el plátanos estará perfecto para usar, pero puede estar congelado durante semanas. Así que si os gusta, podéis ir a comprar 20 plátanos y congelar sus trocitos. ¡Helado listo siempre!

Los trocitos, simplemente, los colocamos en la procesadora.


Y añadimos el medio vaso de leche de soja.


¿Qué hay que hacer ahora? Simplemente, tritutar. Varias cosas a tener en cuenta: 
  • Es mejor tener la batidora a media velocidad, para que así no se trituren los trozos de abajo muy rápido y se calienten
  • Se puede usar una batidora normal de brazo, incluso una batidora de vaso (de esas de hacer zumos). Lo mejor, sin embargo, es la procesadora de comida.


Mientras váis dándole a la batidora, RECORDAD MOVER EL CONTENIDO DE DENTRO, sobretodo el que se engancha a las paredes. Moverlo para que todo se procese por igual.


 Y seguid batiendo hasta que os quede una consistencia de helado. Así:


Este es el momento en el que os quedaréis alucinados. Yo la primera vez casi chillaba por la casa. ¡La textura es increíble! ¿Y el sabor? Solo esperad a probarlo...


¡Y listo! Tenéis todo un bol de helado para disfrutar cualquier momento del día sin preocuparse por nada. Además, si no os gusta demasiado el sabor del plátano como a mi, ¡ni lo notaréis! Y es una forma perfecta de tomar potasio, muy necesario para los músculos.

Espero que le deis una oportunidad al helado porque no volveréis a los comprados, es así de increíble. ¡Un besito enorme!

PST, el helado queda perfecto con toppings: fresas cortadas, pepitas de chocolate, coco rallado, sirope de chocolate, almendras... La originalidad es lo mejor.

miércoles, 4 de febrero de 2015

Magdalenas de vainilla con un extra de proteína (opcional)

¿Qué hay mejor que unas deliciosas magdalenas que, a la vez, te dan buenos nutrientes? Esas magdalenas que puedes comer y no sentirte culpable si te pasas de ración. Simplemente, ¿qué hay mejor que unas magdalenas caseras? Si nunca habéis cocinado repostería, veréis lo bien que sienta comer algo que te has trabajado, sabe cien veces mejor que cualquier bollería que se compre en tiendas.

Los ingredientes, además, no son nada raros. Ingredientes que todo el mundo tiene rondando por casa.


*Proteína: opcional. La proteína isolada de soja es una forma rápida de conseguir proteínas si tienes carencia de ellas y eres vegano. Si le añadís proteína, recordad aumentar la cantidad de leche hasta que la masa tenga una buena consistencia.

INGREDIENTES
1 y ¼ taza harina
1 taza azúcar
1 cdita bicarbonato
½ cdita sal
¾ vaso leche de soja
½ vaso aceite de oliva/girasol
2 cdas vinagre de manzana
2 cditas vainilla

PASOS
Estas magdalenas son muy fáciles de crear, lo más importante es que no queden grumos en la masa y que no nos olvidemos de echar el vinagre de manzana, el cual hará de sustituto del huevo.

Mezclamos en dos recipientes separados los ingredientes secos (harina, azúcar...) y los húmedos (leche, aceite, vinagre...). Mezclamos bien y luego añadimos poco a poco los ingredientes húmedos en el recipiente de los secos.

Mezclamos durante unos minutos para evitar grumos.


Si, como yo, añadís proteína, veréis que la cantidad de ingredientes húmedos no es suficiente. Añadid hasta que la masa os quede de esta consistencia:




Una vez lista la masa, precalentamos el horno a 180ºC. Colocamos la masa en recipientes para magdalena con ayuda de una cuchara o una manga pastelera.

Las metemos al horno con una bandeja y las dejamos unos 20-30 minutos, dependiendo de cada horno. Para saber si están listas, pinchar con un cuchillo y, cuando salga limpio, es momento de sacarlas.



¡Y listo! Si queréis decorarlas como yo, es muy sencillo. Yo hice dos tipos: con nuez y con azúcar. Lo único que hice fue colocar una nuez encima de las magdalenas redondas antes de meterlas al horno, y una cucharadita de azucar en las de forma de corazón. ¡Simplemente eso! Y le da un toque y sabor increíbles.


¿Probaréis estas deliciosas magdalenas? No notaréis la diferencia de las normales si lo hacéis sin proteína, y si decidís hacerlas con proteína, tened en cuenta que el sabor y la consistencia cambiará algo, pero están muy buenas igual. ¡Espero que os animéis a probarlas!